CONTANOS LA EXPERIENCIA DE SER CAPITAN DE LA PRIMERA DEL CLUB DOS TEMPORADAS
Para mí el gran referente y capitán de Old Boys siempre fue el Pichu (Federico) Vilaseca, un loco que jugó y que laburó muchísimo por el club.
La cuestión es que en 2020 estábamos practicando acá haciendo la Pre temporada un jueves de noche y me agarra Pichu y me dice que estaba con muchas cosas y que no estaba con la cabeza al cien para encarar otro año de capitanía y me proponía como capitán. Enseguida le dije que sí, me gustaba el desafío, pero me agarró en un momento que estaba con cambio de laburo, haciendo el MBA y Renata por nacer. Fue un año muy loco, muy intenso, pero pasando raya, de mucho aprendizaje y grandes resultados, no me arrepiento de nada.
Para empezar ese 2020 yo tenía planeado irme un año a estudiar a España y me quedé acá por la pandemia. Ya había avisado que no iba a jugar.
Gracias a Dios me quedé y todo lo que sucedió después fue impresionante.
CONTANOS QUE PASÓ DURANTE ESE AÑO
Arrancamos entrenando por zoom con el profe Fabián Díaz, le dimos duro y cuando empezaron a liberar, nos juntábamos a entrenar.
Fue el primer año del Pelo Ortiz como técnico de la Primera y nos fue muy bien. Propuso un sistema de juego que lo agarramos enseguida.
Un año corto, de 15 partidos y terminamos segundos.
Lamentablemente nos tocó ser contemporáneos con una generación del club El Pinar que durante 10 años ganaron todo.
Ese 2020 disputamos también la Copa de Campeones y también nos tocó perder con Pinar por penales, en cuartos de final.
¿Y 2021?
Fue un año completo, sin interrupciones, podías planificar lo que ibas a hacer durante el año, el equipo que ibas a tener, la disponibilidad de las canchas para entrenar y jugar, un año muy bueno desde lo organizativo.
Ya habían subido algunos guachos, pero ese año subió la Generación 97, que son los que jugaban en el Arsenal varias veces campeones del Interno.
Era un plantel muy consolidado, con 2 reservas y una cantidad de jugadores tremenda- Los entrenadores tenían para elegir lo que quisieran.
Terminamos 4tos.
¿EN QUE MOMENTO EMPEZAS A PENSAR EN LA DESPEDIDA DE LA PRIMERA?
Mirá, en 2022 arranco jugando, tuve algunos malos momentos y empezaron a aparecer jugadores más jóvenes. Me tocó salir y lo hice sin problema. Agarró como Capitán Tito Inciarte y yo mechaba.
Ese año terminamos arriba, pero sin pelear por nada.
Jugamos la Copa de Campeones gracias a la campaña que habíamos hecho en 2021 y salimos segundos.
Cuando terminó el año hice una autocrítica y entendí que no estaba a nivel. Por diferentes motivos no podía entrenar al cien como para intentar nuevamente ganarme un lugar.
Había nacido Azul, mi segunda hija y quería estar más en mi casa con Fefi mi mujer y mis hijas.
La gran pregunta era ¿Qué hago en 2023?
Decidí hacer un último año, ver para qué estaba. Lo hablé en casa y Fefi como siempre me bancó. El apoyo de mi familia y sobre todo mi mujer, fue clave para poder dedicarle el tiempo necesario a Old Boys durante estos últimos años.
No me tocó jugar mucho en Primera, sí en Reserva.
Y ahí sí dije “No voy a ser el viejo que la estira como un chicle” (risas). Decidí sacar el pie del acelerador, disfrutar más y me pasé a la más 32, que es una categoría competitiva y además están todos mis amigos.